Desde el
inicio del ejercicio Roberto ha indagado con herramientas propias y con gran
curiosidad las manchas y colores muy pocas veces legibles que transmitía la
imagen satelital de la ciudad de Azul.
Con una
manera muy personal, ese mapeo satelital comenzó a ser leído y codificado, interpretando
los llenos y vacíos con continuidades y
formas propias que dieron la lectura de territorio.
Esas
formas de raíces, buscando tierra donde aferrarse,
dan sus primeras afloraciones en ideas arquitectónicas, comenzando a crecer y comenzando a materializar la verticalidad en
la llanura Azulina.
El tanque
mirador antena sube aferrado a sus propias formas, con el carácter propio del
nacimiento de la tierra, retorciendo los materiales, y dándole impronta
Salamónica.
Allí está…dialogando
con el cielo y observando el horizonte.
La fuerte
presencia de la vertical comienza a ser abrazada, bajo la misma mirada, por
planos, líneas y direcciones, como si
sus raíces se manifestaran con el deseo de ser vistas y estas tomaran los
primeros genes arquitectónicos, dando
lugar a la contención del territorio y a la expresión de la materialidad.
La
arquitectura ya está allí también…haciendo presencia, creando espacios,
dialogando con el territorio y con la verticalidad del tanque, esperando el uso
y la comunión con el hombre.
Fernando Brunetti
1 comentario:
que grande rober! un laburante
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