lunes, junio 20, 2011

El Taller Trabaja. Juan








“Caminante son tus huellas
el camino y nada mas,
Caminante no hay camino
Se hace camino al andar…”

Que elocuentes resultan las palabras de Machado cada vez que caminamos nuestras huellas entintadas sobre la hoja en blanco que aun nos sigue costando colorear, su inicio en particular, ese primer pie completamente acreditado a cualquier cause y color donde todo es posible. La misma hoja virgen, prístina, de antaño, con su afamada cara de pregunta. Y que más elocuente resulta escuchar el eco de un pie que ante la hoja en blanco no hace más que caminar, sin perder pisada a las incógnitas que lo anteceden, sin olvidar la brisa que lo aviva por detrás.

“El camino cómo el generador de espacios, de nuevas circulaciones y
nuevas disposiciones.
Un camino inicial se quiebra y se divide en otros caminos. En origen
parten de un mismo lugar, para separarse y fundirse y separarse
nuevamente.
Las circulaciones se funden en un espacio común, en un cruce, un núcleo.
Los caminos responden a necesidades distintas, se separan, pero no se
ignoran. Se encuentran, se cruzan, se contaminan entre ellos y
continúan.”

Juan Campanini

Tal es el caso de Juan que en su andar, primero a tientas, luego al trote, encontró en el delta esa primera impronta, esa génesis que descansa, sueña, grita y vive en los pies de los habitantes del delta: el camino. Camino como metáfora del recorrido de un quehacer diario, domestico por un lado, por otro del pié curtido en el hacer del esfuerzo el pan, del pié que busca compañía y apaño en su hermano, en la familia y en el trabajo, pié que en su búsqueda se avienta hacia el agua para extender sus orillas mas allá o más acá del río. La impronta de Juan nos clarifica un recorrido como prólogo de una forma de habitar, no como totalidad sino como generatriz, no se olvidan esos pies que los caminos no son sólo meras formalidades lineales que unen espacios, sino instancias palpables, acompasadas, donde los pasos se convierten en casa, en senda, en plantaciones, en río, en galpón, en vivero o en espacios recreativos.
No es poca cosa entender el delta desde la latencia del caminante, proponer tiempos de llegada, recorridos contemplativos, nodos pausados donde la comunión del isleño se hace patio, donde un muelle se hace raíz. Ya desde un comienzo Juan trabaja con sus pies, desde el trabajo anterior, donde el centro de sus caminos se nombra como patio, donde las fluctuaciones de un entorno esquivo se aquieta o aligera, se abre o cierra según uso o necesidad, donde paredes y techos se hacen también partícipes de un recorrido superador de la finitud del elemento aislado.
Y ahora, nuevamente, en esta etapa donde el acopio se hace protagonista, el sendero se enraíza desde un muelle, pié segundo del camino de Juan. Primero se aligera hacia el sector de acopio y hacia la administración, después se aleja bordeando el galpón, en paso mas pausado, obligando a la contemplación de ese entorno para así entrar de costado al sector recreativo, y en un tercer brazo, se fuga hacia el fondo, hacia los talleres y vivero, resguardos por el entorno natural del loteo.
Se percibe así la consecuente búsqueda de una unidad, de un camino continuador de aquellas huellas postreras.
Todo manifestado con lo que Marechal llama “ la mano que no tiembla”, donde, aún con trazo veloz, se puede apreciar la latencia de la propuesta.


Grupo: Estefania-Sebastián

5 comentarios:

Anónimo dijo...

muy bueno!

Anónimo dijo...

+otra vez con caminante no hay camino al andar.... la catedra se tendria q llamar asi

Anónimo dijo...

Que mamita que son algunos... porque no se ponen a laburar en vez de hinchar las pelotas por cualquier boludez?
Y me anticipo... La arquitectura que vemos en este nivel lleva un tiempo para desarrollar las tematicas y esclarecer ciertas cuestiones, ni siquiera termino el primer cuatrimestre y algunos comentarios parecen hechos por Wright, Alvar Aalto y Le Corbu juntos, una cursada de arquitectura 2 no es pedir una pizza al delivery, mal que le pese a algunos automatas...

Anónimo dijo...

a que viene esto???

Anónimo dijo...

a nada... típico comentario superfluo poco constructivo y con airesito superador, que refleja su carente comprehensión sobre el contenido y el sentido con el que fueron hechos los comentarios.

:)FU GA ZZE TAAAA!