martes, agosto 07, 2018

Gonzalez Florencia




1 comentario:

Anónimo dijo...

...finalmente el arquitecto perdió su magia, perdió las esencias que le dieron sentido a su vida, perdió sus artes de las cuales se había aferrado con uñas y dientes, lo perdió todo, hasta incluso la admiración que de sus compañeros supo otrora ganarse...
¿¿por que?!!

No encuentro respuesta...y de tenerla, no la acepto...sólo hay
decepción